Las personas
nos relacionamos con nuestro entorno y ambiente a través de nuestros sentidos.
Conocemos lo que vemos, oímos, tocamos, etc. O eso creemos…
Y es que generalmente
no nos planteamos si lo que vemos, oímos o sentimos es cierto, todo lo que
perciban nuestros sentidos será considerado real.
Pero, ¿Y si
no es así?, ¿Y si te dijésemos que tú como cualquier otra persona puedes ser víctima
de un engaño de tu cerebro? Si no te lo crees, hoy en Psicoves Psicología vamos
a explicártelo.
Hoy presentamos “Las alucinaciones” ¿Te atreves a descubrirlas?
La definición
más utilizada cuando hablamos de alucinación es la de percepción de una
realidad inexistente, es decir, sentir o percibir sin que haya un estímulo real
que lo provoque, sin embargo, para aquellas personas que lo sufren se trata de una
percepción totalmente real.
No debemos
confundirlas con las ya conocidas ilusiones, en las que sí que existe un estímulo
real, sólo que es interpretado de forma errónea o distorsionado, como por
ejemplo los espejismos.
Las
alucinaciones además pueden ser clasificadas en distintos tipos según su
modalidad sensorial en visuales, auditivas, táctiles y olfativas.
¿Cuáles son
las más frecuentes? Las alucinaciones auditivas. Que no sólo implican oír
voces, pueden ser un ruido como una pisada, una puerta que se cierra o simplemente música ,además
pueden percibirse como una voz interior pero en ocasiones también como una voz externa, la
de un amigo/a o un familiar.
Ahora bien
¿Qué causa una alucinación?
Pues
generalmente aparecen asociadas a enfermedades y trastornos psíquicos como la
esquizofrenia, trastornos bipolares, demencia, epilepsia o estrés
postraumático, también cuando existen tumores cerebrales.
Pueden darse tras alteraciones del sistema nervioso como la privación del
sueño, abusos de sustancias como el alcohol o las drogas e incluso tras la
ingesta de determinados medicamentos.
Sin embargo,
lo que desconocen muchas personas es que una persona sana puede ser también
víctima de una alucinación. Existen estudios que muestran que entre un 10 y un
40% de las personas sanas ha experimentado algún tipo de alucinación auditiva.
Por ejemplo, tras el estrés experimentado ante la muerte de un familiar muchos
afirman continuar oyendo a esa persona. También en algunas personas justo antes
de dormirse (alucinaciones hipnagógicas) o justo después de despertarse
(alucinaciones hipnopómpicas).
Pero, ¿Somos las
personas conscientes de nuestras alucinaciones?
Dado que las
alucinaciones son percibidas como reales, es difícil determinar si lo son o no.
No obstante, hay personas que son
capaces de darse cuenta de que lo que perciben no puede ser real y
concluir que se trata de una alucinación, evitando así que interfieran
demasiado en su vida diaria.
Además,
también existen las perturbaciones, que son formas leves de alucinación en
cualquiera de nuestros sentidos y que casi todos hemos sufrido alguna vez como el parecerte
ver un movimiento en la visión periférica, o escuchar ruidos débiles y / o
voces...
Por lo que
sabemos, nuestro cerebro tiene múltiples formas de engañarnos por lo que no
siempre podemos fiarnos de nuestros sentidos. Si creías que alucinar era algo
improbable sin tomarte alguna sustancia o padecer una enfermedad mental,
estabas definitivamente equivocado/a.
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