Ves a alguien golpearse el dedo
del pie e inmediatamente te estremeces, estas viendo una película donde alguien
corre por que le persigue un cruel asesino y tu corazón se acelera mientras los
músculos de tu pierna se contraen o un amigo tuyo pone cara de asco mientras
prueba un alimento y de repente, tu propio estómago repugna la idea de comer…Esta
habilidad para entender de manera instintiva e inmediata lo que las otras
personas están experimentando es lo que llamamos empatía y no sólo está presente en el ser humano sino
en otras muchas especies. ¿Pero qué significa realmente ser empático?
A principios de los años noventa,
investigadores italianos hicieron un descubrimiento asombroso e inesperado.
Habían implantado electrodos en los cerebros de varios monos macacos para
estudiar su actividad cerebral durante diferentes acciones motoras, incluida la
ingesta de alimentos. Un día, mientras un investigador alcanzaba con la mano su
propia comida, notó que las neuronas de los monos comenzaron a disparar
impulsos en la misma área de la corteza cerebral premotora que se activaba
cuando los animales hacían un movimiento con la mano similar al que hacía el
investigador. Inmediatamente los investigadores se plantearon la siguiente
cuestión ¿Cómo era esto posible si los monos estaban sentados y quietos,
simplemente mirándolo?
Lo que el grupo de Giacomo
Rizzolatti había descubierto es lo que
hoy conocemos como neuronas espejo, unas neuronas que se activan de forma
idéntica tanto cuando las acciones son realizadas por nosotros mismos cómo
cuando son producidas por un tercero. Esto supone que, por ejemplo, cuando vemos
a alguien coger un vaso nuestro cerebro activará automáticamente las mismas
áreas motoras que se activarían si yo mismo estuviese agarrando un vaso, y es
por esta razón, por la que son llamadas neuronas espejo, porque es como si
estuviésemos contemplando nuestra propia acción en un espejo, convirtiéndonos en
el espejo de los demás.
Hoy casi 20 años después sabemos
que estas neuronas también nos permiten descifrar, recibir e interpretar
expresiones faciales. Cuando una persona realiza una expresión facial, se
activan las mismas regiones de nuestro cerebro que se activarían al ejecutarla por
nosotros mismos y cuanta mayor actividad hay en nuestro sistema de neuronas
espejo, mejor es nuestra interpretación de las expresiones faciales.
Estos hallazgos sugieren que el
sistema de neuronas espejo juega un papel clave en nuestra habilidad para identificarnos
y socializar con otros, así como para comunicar nuestras emociones,
principalmente a través de expresiones faciales.
Así que llegados a este punto, te
hacemos la siguiente pregunta; ¿Nunca te has preguntado por qué sientes una
reacción física cuando ves el dolor en otros?
Las neuronas espejo al ser
responsables de reflejar las sensaciones de los demás, hacen que nos sintamos
casi como si las viviésemos en nuestra propia piel, de hecho si no fuera por
ellas, no nos estremeceríamos al ver una película de miedo o sentiríamos pena e
incluso ganas de llorar al ver una escena triste y por tanto, no nos
emocionarían las historias de los libros que leemos o nuestra serie favorita.
Y es que realmente nos pasamos el día
percibiendo las emociones de los demás y simulándolas en nuestro interior... ¡las neuronas espejo no descansan! imitan incluso las expresiones musculares
más insignificantes de otras personas de forma automática,
informándonos de cómo se sienten a cada momento, de hecho, a nuestras neuronas
espejo les importa más lo que ocurre a nuestro alrededor que saber quién realiza la acción.
Pero las neuronas espejo no sólo
nos conectan con los demás informándonos de sus múltiples acciones, sino que
además son fundamentales para la imitación y por tanto, intervienen en el
aprendizaje social, muchos antropólogos sostienen que es esta capacidad, la que
nos ha permitido sobrevivir ayudándonos a resolver problemas y dificultades.
Y esto no es todo, según
recientes investigaciones las neuronas espejo están también relacionadas con el
lenguaje.Generalmente cuando hablamos usamos nuestras manos y las neuronas
espejo intervienen en el control del movimiento de nuestras manos interpretando también los gestos de las
manos de los demás, así en diversas investigaciones se ha encontrado que cuando escuchamos a hablar a otras
personas, se activan zonas del lóbulo frontal que también se activan al hablar con los demás, es decir, las zonas
cerebrales que controlan la lengua y los labios están tan activas como si habláramos
en ese momento.
Pero lo más sorprendente que los
investigadores han descubierto sobre las neuronas espejo es que no sólo
identifican los movimientos y los repiten, sino que hacen atribuciones de las
intenciones que hay detrás. Cuando vemos a alguien realizar una acción no sólo interpretamos sus actos, sino que además, sacamos
conclusiones sobre porqué lo hace y en qué circunstancias. Si por ejemplo,
vemos a alguien coger un vaso de una mesa limpia, nuestra mente activará
levemente nuestras neuronas espejo, pero si vemos la misma acción con una mesa
sucia deduciremos que la persona está recogiendo la mesa y esto las activará
aún más, esto también ocurrirá si vemos la misma acción y esta vez la mesa está
llena de comida, creeremos que la persona se dispone a beber mientras esta
cenando.
Por tanto, podemos afirmar que
las neuronas espejo recientemente descubiertas, están implicadas en la
capacidad que tenemos las personas para empatizar, y esto ocurre porque se
comunican con los centros cerebrales responsables de las emociones (sistema
límbico) y cuanto más se activan estas áreas, mayor es la empatía que sentimos.
Si vemos a alguien sonreír, nuestras neuronas espejo crearán una especie de
representación de esa sonrisa en nuestro cerebro, una especie de imitación
interna y luego, enviarán señales al sistema límbico haciendo que sintamos lo que
la otra persona está sintiendo.
Es por ello que no podemos evitar
sufrir al ver a otra persona sentir dolor, llorar al ver a alguien
emocionarse, sentir la alegría cuando ves a otros reírse y en definitiva,
sentir lo que sienten los demás.
Gracias por tan buen reportaje, pero aun sigo sin entender por k si somos tan inteligentes hemos evolucionado a través de los años, como es posible ver tanto maltrato hacia los animales, hacia los niños, hacia nuestro próximo hacia el medio ambiente, no puedo entenderlo estamos evolucionando? o estamos retrocediendo?
ResponderEliminarno, no es evolución. pero tu planteo me alegra bastante, suele ocurrir que la empatia muchas veces no quiere ser demostrada por el hecho de no querer reconocerla o que la reconozcan y sucede lastimosamente en muchas instituciones lo cual es efimero para mi explicación porque en una institucion por ejemplo, educativa se puede lidiar con la mayor activacion de las areas del sistema límbico, se supondria que los que tienen mayor actividad de este tipo y, por lo tanto sienten mas, deben ser mas y mejor cuidados, lo que no quiere decir que puedan ser mayormente preparados para el ritmo de personas que estan en alta situacion de riesgo economico. Osea una persona empatica no tiene la obligacion de aquellos desamparados. por muchos medios pero mas que esto son necesarios estudios de asistencia social, atención multilateral, y social.
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